Se presentan de forma vertical, horizontal y/o diagonal; tanto en el interior como exterior de las viviendas; en la proximidad al suelo y/o a distintas alturas y en diversos lugares (cercano a puertas, ventanas, esquinas. Las más problemáticas son las diagonales, escalonadas o en zig-zag, de 5cm de espesor o mas, ya que indican la presencia de daño estructural serio y progresivo.
Pueden estar acompañadas de hundimientos y puertas trabadas. Generalmente son causadas por excesos hídricos, aunque también por motivos geológicos (suelos limosos y limos-arcillosos), roturas de cañerías, desmoronamiento de pozos, construcciones adyacentes o el mero paso del tiempo. Si no son tratadas a tiempo, puede agravar
el problema estructural.
Las grietas en paredes son una patología cada vez más común en todo tipo de construcciones. Las hay:
Los problemas de grietas se producen por una combinación entre: debilitamiento de las fundaciones de la propiedad, por un lado, y pérdida en la capacidad portante del suelo bajo las mismas, por otro.
Por diversos motivos, los inmuebles pueden asentarse sobre una base no uniforme, generando asentamientos diferenciales. Estos se producen, ya sea en una parte o en la totalidad del inmueble, con su consiguiente sintomatología: grietas en paredes; hundimientos; desniveles; aberturas funcionando incorrectamente.
Se expanden o contraen ante distintos shocks. Arcillas, limos, gravas, o arenas, sufren distintos efectos en función de su textura, densidad, contenido y PH del agua, pero también de los regímenes de temperatura, precipitaciones y humedad; todos factores que inciden en la fortaleza del suelo.
Tanto el exceso como la escasez de agua modifican la capacidad portante del suelo. Mas aún, el ascenso del nivel freático o la rotura de cañerías, con su consiguiente filtración, contribuyen al debilitamiento progresivo del terreno. Cuando estos problemas están acompañados por falencias en el drenaje, suele ser una combinación problemática.
Suelo no-apto para edificación; deficiente consolidación y/o compactación del terreno; cimentación pobre; errores en la transmisión de cargas; utilización de materiales constructivos inapropiados.
Los climas adversos afectan las construcciones. No tiene que haber un sismo o un terremoto para que la edificación se vea afectada; lluvias concentradas en un corto período de tiempo, tormentas, temperatura extrema o humedad, pueden afectar la edificación.
Grietas chicas, generalmente en la mampostería (superficiales), no son problemáticas en sí mismas. Son, más bien, el resultado de expansiones y contracciones del suelo bajo fundaciones, y pueden ser fácilmente emparchadas y pintadas. Sin embargo, si estas grietas presentan alguna de las siguientes características, podría indicar debilitamiento en las fundaciones de la propiedad:
A su vez, es importante identificar otra sintomatología o conjunto de factores que podrían indicar signos de subsidencia: ¿los pisos están hundidos o desnivelados? ¿Las puertas o ventanas han dejado de funcionar correctamente? ¿Las cañerías están rotas? ¿Ha habido o hay algún pozo desmoronado o sin rellenar en la proximidad a las grietas? ¿Hay charcos de agua en el perímetro externo a la vivienda? ¿Se ha roto alguna cañería publica? ¿Algún vecino ha construido en las inmediaciones?
Las soluciones de largo plazo tienen como finalidad reforzar las fundaciones para así frenar el avance del asentamiento diferencial. Este método se llama recalce de fundaciones.
Una vez que el recalce es efectuado, las grietas pueden cerrarse o reducirse, y las aberturas vuelven a funcionar correctamente.
Los sistemas de recalces tradicionales, como las submuraciones, zapatas o micropilotes, consisten en realizar excavaciones en la proximidad a los muros portantes con el objetivo de reforzar las fundaciones bajo nivel del suelo. Estas tareas suelen ser lentas (pueden tardar semanas e incluso meses), y estar acompañadas de roturas en la arquitectura. Aparte, son muy invasivas, ya que mientras se interviene, es necesario desalojar la propiedad, paralizar actividades y movilizar mobiliarios.
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